FENG SHUI, EL YIN Y EL YANG COMO OPTIMIZARLOS

FENG SHUI, EL YIN Y EL YANG COMO OPTIMIZARLOS

Lo más importante no es recordar qué es Yin o Yang, sino observar en qué partes de nuestra casa aparece cada una de ellas de forma más o menos continuada. Debemos examinar nuestro hogar para ver qué habitaciones se asocian con cada una de esas dos vertientes. Una vez hecha la comprobación, reflexionaremos sobre si esta situación ambiental desequilibrada es propicia a las funciones que vamos a desarrollar en ella. Si hablamos del despacho, por ejemplo, un exceso de elementos Yang (energía activa) es más que apropiado.

Sin embargo, en el dormitorio, un exceso de elementos Yin (energía pasiva) facilitará nuestro descanso.

Si cualquiera de las habitaciones de su casa tiene un exceso de Yang  y considera que ese desequilibrio desfavorece su habitabilidad, añádale algo Yin.

Modos de ampliar el Yin:	Modos de ampliar el Yang:
Ampolletas de pocos vatios para reducir la intensidad de la luz	Ampolletas de muchos vatios
Mobiliario de líneas curvas y que no sobrepase la mitad de la altura de la habitación	Mobiliario alto, de formas y líneas rectas
Colores oscuros y apagados	Colores brillantes (y si es necesario hasta chillones)
Agua en movimiento (una pecera sería adecuado)	Ambiente seco (podemos usar deshumidificadores)
Materiales suaves al tacto (seda, terciopelo)	Tejidos muy sólidos (loneta)
Silencio (apagar radios, televisores, aparatos de música, y toda clase de motores que puedan haber cerca: ventiladores, aire acondicionado......)	Movimiento (relojes, música, motores)
Soledad	Invitar a los amigos
Si permanecer en determinada dependencia de la casa nos genera estados de apatía o exceso de cansancio, lo que debemos hacer es añadir al ambiente unas pizcas de Yang	Vestir las paredes (librerías, cuadros, posters)

EL EQUILIBRIO DEL YIN Y EL YANG EN LA PAREJA:

Para las tradiciones basadas en esta concepción, el equilibrio en una pareja se alcanza cuando en cada individuo se ha logrado contrarrestar los elementos yin y yang, que de este modo se ponen al servicio de la felicidad de la pareja y de cada uno de sus integrantes. Para que esto sea posible, en la mujer deben desarrollarse y acrecentarse los elementos yin y, por otro lado, suavizarse o reencauzarse los elementos yang. En el hombre debe suceder lo opuesto; y en ambas partes debe darse la complementariedad que lleve al equilibrio.

De esta forma, la armonía de las fuerzas que cada uno pone en la pareja hacen a la felicidad y la plenitud de vida de sus integrantes.

Fuente Feng Shui aplicado